texto y fotos Peter Adones
El pasado Domingo 18 de Noviembre de 2018, parte de la comunidad latina residente en la ciudad de Christchurch, Nueva Zelanda, se reunió para manifestar su repudio por el asesinato de Camilo Catrillanca a manos del comando jungla, en la región de la Araucanía.
La invitación fue hecha a través de las redes sociales, invitando abiertamente a todos los que quisieran solidarizar con el pueblo Mapuche desde estas lejanas y pacificas tierras. El llamado tuvo una muy buena recepción en la comunidad y llegaron muchas personas, amigos y familias hasta el centro de la ciudad en Cathedral Square.
La vez anterior nos reunimos para manifestar nuestro apoyo a las mujeres mapuches vendedoras de hortalizas y verduras, quienes fueron fuertemente reprimidas en la ciudad de Temuco por fuerzas especiales de carabineros, y en esta oportunidad, no pudimos quedar ausente ante este cobarde asesinato.
La comunidad latina residente en Nueva Zelanda sigue de muy cerca el acontecer nacional de nuestro país, y vemos con mucha impotencia la cantidad de abusos cometidos contra los ciudadanos y en especial, contra el pueblo Mapuche. Sentimos que tenemos el compromiso moral de levantarnos en un gesto simbólico de apoyo al pueblo mapuche, ante situaciones de abusos por parte del estado chileno.
Camilo Catrillanca estaba luchando para que la Corporación Forestal MININCO, de propiedad de la familia Matte, devolviera 15.000 hectáreas robadas a la comunidad Mapuche y, por esta razón, estaba siendo acosado por el comando jungla de Carabineros. La versión, que a cada hora cobra más fuerza, dice que el asalto y robo de los autos a las profesoras fue una operación montada y organizada por el comando jungla, para justificar la ejecución y el crimen de Camilo.
Esta versión de los hechos cobra más sentido al analizar todo lo sucedido:
1. Acusan a Camilo Catrillanca de robar un vehículo, sin embargo, el menor que lo acompañaba y testigo clave de su muerte, estuvo con él gran parte del día trabajando en el campo.
2. Camilo Catrillanca recibió un disparo en su cabeza mientras conducía un tractor camino a casa. Es totalmente ilógico pensar que se cambió de vehículo para escapar de la policía. Todos sabemos que un tractor no es más rápido que un auto.
3. Los únicos carabineros que participaron en el asesinato de Camilo, mintieron al fiscal y después se comprobó que uno de ellos destruyo la memoria de la cámara Go Pro que grabo el crimen
4. Después del escandaloso caso Huracán, donde quedo al descubierto múltiples montajes hechos por carabineros para incriminar Mapuches, pensar en un montaje no es algo extraño ni alejado de la realidad.
El Comando Jungla es la fuerza policial destinada para luchar contra la comunidad Mapuche catalogada como terroristas, pero que en el fondo lo que busca es defender y proteger los intereses de los empresarios forestales y de la industria extractivista.
Este comando está conformado por 80 funcionarios de Carabineros que se prepararon en Colombia y Estados Unidos para “combatir la violencia rural en la zona”. Entre el equipamiento que manejan encontramos camionetas blindadas, tanques, sistemas aéreos, binoculares, cámaras HD y uniformes especiales, con todo esto buscan reprimir a quienes solo luchan por la justa reivindicación de sus tierras que les han sido robadas por el estado de Chile y los grandes Capitales.
El historial de violencia contra el pueblo mapuche no es una novedad en nuestro país. El asesinato de Camilo Catrillanca es una de las tantas manifestaciones fatales de una política de Estado que ha sido condenada por diversos organismos internacionales, como la ONU y Amnistía Internacional.
Revisa las imágenes de la jornada: