De ratones a ronroneos: Las nuevas «empleadas /funcionarias» del Juzgado de Policía Local de Independencia

texto María Isabel Chandía | foto Juzgado de Policía Local  Independencia

Dos gatitas hermanas se convirtieron en las mascotas oficiales del tribunal local y traen armonía a funcionarios y visitantes.

Lo que comenzó como una solución práctica terminó convirtiéndose en una historia entrañable. Ante la presencia de ratones en las dependencias del inmueble donde funciona el Juzgado de Policía Local en Independencia, el juez Ernesto Vásquez, junto a las funcionarias, decidieron tomar medidas tras el uso de trampas y veneno, y al ver que no funcionaba, optaron por una alternativa natural y mucho más amigable. Así fue como llegó lo que en primera instancia sería una gatita, se transformó finalmente en dos.

Las protagonistas de esta historia son dos gatitas felinas (Norma y Ley-Di) que, tras su llegada, no solo cumplieron con su «labor» de mantener alejados a los roedores, sino que también se ganaron rápidamente el cariño de todos los integrantes y usuarios del juzgado.

Gatitas con cargo oficial

Desde su adopción, las mininas se han convertido en parte relevante del equipo. Algunos funcionarios del juzgado han organizado turnos para su cuidado, limpieza y alimentación, asegurándose de que tengan un espacio cómodo y bien atendido.

«Al principio pensamos en traer solo un gato, pero cuando vimos a estas dos hermanitas, nos fue imposible separarlas. Ahora son parte de nuestra familia laboral», comenta Ernesto Vásquez, juez de Policía Local de Independencia.

Además de traer compañía a quienes trabajan en el tribunal, las gatitas han mejorado la experiencia de los usuarios de quienes visitan el juzgado. Los niños que acompañan a los adultos disfrutan viéndolas jugar, lo que ayuda a aliviar la tensión en un espacio que, en muchas ocasiones, puede generar estrés.

Un toque de calidez en el juzgado

La presencia de las gatitas ha cambiado la rutina en el tribunal. Lo que antes era un ambiente muy estructurado, ahora tiene un toque de calidez y cercanía gracias a sus pequeñas «mascotas oficiales». Funcionarios y visitantes disfrutan de sus travesuras, y no falta quien les lleve un regalo o una golosina especial.

La historia de las felinas del Juzgado de Policía Local de Independencia es un ejemplo de cómo un simple gesto puede transformar un espacio de trabajo en un lugar más acogedor y humano. Ahora, con sus dos nuevas «compañeras de oficina», este juzgado no solo busca impartir justicia, sino que también ofrece cariño y compañía a quienes lo visitan y por cierto, esperan la credencial oficial para estas hermosas gatitas que desempeñan un rol muy importante

Terapia laboral: el impacto positivo de los gatos en el trabajo

La presencia de gatos en entornos laborales no solo aporta compañía, sino que también tiene beneficios comprobados para la salud mental. Estudios han demostrado que interactuar con animales reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y fomenta un ambiente de trabajo más armonioso. 

Muchas empresas y oficinas han comenzado a adoptar esta práctica, permitiendo que los gatos sean parte del equipo y ayudando a crear un entorno más relajado y productivo. 

En el juzgado, las gatitas no solo cumplen su función de control de plagas, sino que también se han convertido en una forma de terapia laboral para la gran mayoría de los funcionarios, quienes encuentran en ellos un momento de distracción y bienestar en medio de sus labores diarias.